Opinión #ArturoBrizio | 29-Marzo-2024
No se vale
Arturo Brizio EN REFORMA
29 marzo 2024
Corría el mes de marzo del año de 1993 cuando recibí la noticia de que estaba designado para asistir a la Copa América, el prestigioso torneo para selecciones de Sudamérica, que en esta ocasión abría la puerta para dos cuadros invitados de la Concacaf.
Los Estados Unidos y el equipo tricolor viajarían a Ecuador para, por primera vez, participar en esa justa que con el paso de los años, se convertiría en continental.
México tuvo una destacada actuación, llegando a la Gran Final, la cual perdería ante Argentina.
Los pupilos del Doctor Miguel Mejía Barón desplegaron un futbol ágil, vertical y contundente que hizo maravillar al público local y emocionar a la feligresía azteca.
México tuvo una destacada actuación, llegando a la Gran Final, la cual perdería ante Argentina.
Los pupilos del Doctor Miguel Mejía Barón desplegaron un futbol ágil, vertical y contundente que hizo maravillar al público local y emocionar a la feligresía azteca.
Un servidor fue enviado con el contingente arbitral que dirigiría el Grupo B a la bellísima ciudad de Cuenca, debutando en el partido de Brasil vs Perú, el cual terminó con empate a cero.
El encuentro en que se dirimiría el pase a la siguiente ronda sería entre el cuadro amazónico y el durísimo equipo de Paraguay.
Aquí aparece el personaje al que quiero referirme en esta colaboración.
Aunque la contienda terminó con la victoria de la Verdeamarela al son de tres por cero, la figura del encuentro fue el guardameta guaraní, José Luis Chilavert.
La personalidad de este jugador era impresionante. Su carismático liderazgo imponía a rivales y alentaba a sus compañeros.
Además, se encontraba en el pináculo de su carrera defendiendo el arco de un equipo de época como el Vélez Sarsfield de Argentina, con quién lo ganó todo.
Chilavert anotó 62 goles en su carrera, lo que constituye un hito para alguien que se desempeñó siempre bajo el arco.
Jugó los Mundiales de Francia 98 y Corea-Japón 2002. Imposible olvidar cómo se agigantaba a cada minuto, manteniendo su puerta imbatida ante los galos en el Estadio de Lens.
El partido lo ganaron Les Bleus con el primer "gol de oro" de la historia, anotado en el tiempo extra por Laurent Blanc.
El mundo sabía que si el partido llegaba a la tanda de los penales, "Chila" sería factor fundamental.
Del otro lado de la pinza aparece un futbolista contemporáneo, Vinicius Junior, estrella del Real Madrid y uno de los jugadores más desequilibrantes del mundo.
El astro brasileño ha sido blanco recurrente de ataques racistas y en una reciente entrevista, incluso soltó el llanto para externar que cada vez le cuesta más trabajo lidiar con ello.
El encuentro en que se dirimiría el pase a la siguiente ronda sería entre el cuadro amazónico y el durísimo equipo de Paraguay.
Aquí aparece el personaje al que quiero referirme en esta colaboración.
Aunque la contienda terminó con la victoria de la Verdeamarela al son de tres por cero, la figura del encuentro fue el guardameta guaraní, José Luis Chilavert.
La personalidad de este jugador era impresionante. Su carismático liderazgo imponía a rivales y alentaba a sus compañeros.
Además, se encontraba en el pináculo de su carrera defendiendo el arco de un equipo de época como el Vélez Sarsfield de Argentina, con quién lo ganó todo.
Chilavert anotó 62 goles en su carrera, lo que constituye un hito para alguien que se desempeñó siempre bajo el arco.
Jugó los Mundiales de Francia 98 y Corea-Japón 2002. Imposible olvidar cómo se agigantaba a cada minuto, manteniendo su puerta imbatida ante los galos en el Estadio de Lens.
El partido lo ganaron Les Bleus con el primer "gol de oro" de la historia, anotado en el tiempo extra por Laurent Blanc.
El mundo sabía que si el partido llegaba a la tanda de los penales, "Chila" sería factor fundamental.
Del otro lado de la pinza aparece un futbolista contemporáneo, Vinicius Junior, estrella del Real Madrid y uno de los jugadores más desequilibrantes del mundo.
El astro brasileño ha sido blanco recurrente de ataques racistas y en una reciente entrevista, incluso soltó el llanto para externar que cada vez le cuesta más trabajo lidiar con ello.
Abro paréntesis para decir que, sin justificar el tema racista, Vini se la pasa provocando al rival, incitando al público, cuando su deber sería el observar un comportamiento intachable, caballeroso y dentro del "juego limpio" por el que clama. Chilavert, en una entrevista reciente, ha dicho textualmente: "el futbol es de hombres", para rematar: "Vinicius es un maricón".
Nadie sabe lo que pesa el fardo más que el que lo carga. Inadmisible que un histórico arremeta contra un compañero de profesión en un tema indefendible.
Simplemente...no se vale.
X: @arturobrizioc
Nadie sabe lo que pesa el fardo más que el que lo carga. Inadmisible que un histórico arremeta contra un compañero de profesión en un tema indefendible.
Simplemente...no se vale.
X: @arturobrizioc
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